lunes, 5 de mayo de 2008

Mil oficios

No soy bankero ni gerente, menos empresario. No trabajo en el estado ni en ninguna empresa transnacional. No gano cifras exorbitantes, como algunos de mi promoción, ni tampoko manejo carros del año, como muchos de mi promoción. Pero me gusta mi trabajo, y me gusta pork, aparte k aprendo, me hacen sentir importante, además pork entro a las diez de la mañana, pork salgo cuando kiera, pork mis almuerzos duran tres horas, pork no uso terno, pork puedo escribir este post mientras trabajo en mi espaciosa oficina (no cubículo, o-f-i-c-i-n-a, ubíkate), pork puedo dormir en esta silla reclinable, pork nadie me ayudó a conseguir esta chamba, pork sufrí millones en conseguirla. Esos millones k me hubiera ahorrado si es k tan sólo hubiera escuchado a mi viejo, en esas épokas de inestabilidad adolescente.

Mi papá siempre me decía, desde k yo era un cachimbo dieciseisañero, k para conseguir un buen trabajo tenía k sacarme la mierda, léase estudiar mucho, sacrifikar juergas y cosas banales, cambiar mis numerosos malos hábitos, y hasta renovar mi catalogo de borrachosos amigos y cariñosas amigas por otros más "responsables y maduros" (sic).

Yo, terko, tapado y contreras as usual, obviamente no le hice caso. Nunka estudié como debí (los onces y los suplikatorios dan fe de ello), los malos hábitos se conservan casi inamovibles, y la renovación de amigos sigue en stand by.

Es así k cuando llegúé, por fin, a los últimos ciclos de la universidad, me di cuenta de la verdad de los sabios consejos de mi padre. Ser el úniko alumno con zandalias, chullo serrano, cara legañosa, sin bañarse, y vistiendo shorts y polos multicolores ya no se veía tan fashion en medio de tantos ternos oscuros, corbatas coloridas, camisas planchaditas y linchecitas, y peinados engominados de mis trabajadores amigos. Ser el úniko desempleado del salón, a esas alturas ya era muy rochoso y vergonzoso.

Así k decidido a no ser la oveja negra de mi promoción universitaria (suficiente con serlo de la familia), me puse mi mameluko de jean y mi kasko de ingeniero, y empezé a mandar currículums casí vacíos y bien risibles a todo el mundo empresarial para lo k sea. El trabajo dignifika, me habían dicho.

Mi primer trabajo fue como encuestador, ya hace varios años. Mi ingenuo y abusivo empleador me contrató para hacer encuestas en las zonas más vapuleadas de Lima, léase conos y el Callao. Mucha veces fuimos, mis amigos encuestadores y yo, robados, correteados, aganzados, asustados, botados, y casi vilipendeados por los cardúmenes de pirañitas k pululaban y pululan por esos lares. No saben cómo extraño mis zapatillas Troops con luces. Choros de mierda.

Cansado de tanto maleteo, pasé, orgullosísimo, a un banco. También era un trabajo de campo en dónde la ¿ventaja? de conocerme Lima desde Casuarinas hasta Carabayllo y tener brevete, me dió la oportunidad de ganar un sueldo jugoso para ser un mediokre estudiante de universidad.

Me aburrí de esa chamba y entré a, tal vez, la peor chamba del planeta, luego del de prostituto. Otro banco me contrató para ser vendedor de tarjetas de crédito, aj aj y aj. No hay mucho k decir, sólo k gracias a mi, varios de mis amigos ahora están en Infocorp. I'm really sorry.

Una empresa estatal, la más grande del país, me salvó la vida. Gracias al nepotismo y corrupción k reina en el gobierno, pude entrar. Fue mi primer trabajo de saco y corbata, el más decente de todos. Practikante del área de Finanzas, nada menos, y bien pagado. Un año despues y diez kilos de más, gracias a la gran vida k me metía con mi añorada, me botaron.

Cuatro meses después y ya egresado de la universidad, una AFP, la más rentable del medio, se apadió de mi estado catatóniko, de mi estado de pobreza económika y espiritual por la k pasaba en ese momento, y me contrató. Me convertí en un amateur Analista de Inversiones, creo k hice kebrar a muchos ancianitos.

Un año despues, y ya en el 2008, después de un merecido descanso laboral por gringolandia, he conseguido un nuevo trabajo. Luego de una ardua buskeda claro está. Ahora soy parte de la PEA activa, créanlo.

¿Kién se iba a imaginar k ese jovenzuelo con ropas estrambótikas k se dormía en absolutamente todas clases del nido, del colegio y de la universidad, ese chiko con una experiencia laboral digna de un mil oficios sin oficio, ese chiko k nunka escuchó los consejos y crítikas constructivas de sus padres, ese chiko k prefiere escribir tonterías en un blog k leer el Gestión o El Comercio, iba conseguir un trabajo tan envidiable por muchos economistas? Yo no, mi viejo menos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

ese danielito q cague de risa quien diria ps, tambien luego de 1000 entrevistas una tenias q ligar... q suerte tienen los q no se bañan!! jaja

pero te lo mereces ah! la has sudado y a mi tb me has hecho sudar ;) muak

te kiero

Anónimo dijo...

Te vuelves mejor analista y consultor cuando t presentan nuevas chicas,, porq de ahi como lo dices pobre los abuelitos...

Anónimo dijo...

zapatillas troops con luces????? osea con luces??? y a mi me dices chola? jaja...pero no esta mal...si t mostrara mi cv :( pero voy a continuar buscando algo q no sea tan lejos q no pague tan poco y q sea d mi carrera...es tan dificil???besos grandes como tu panza d antes.frentes

Anónimo dijo...

Jajajaja quizás te han visto potencial.... digo quizás... o eres un tremendo actor... en todo caso aprovecha que la calle esta dura varón.

Nos leemos.

Anónimo dijo...

tranquilo poes consultor junior, pallá!